Esa lágrima que recorre mi facción izquierda.

Buenos días...

Hoy comparto fragmentos de mí, hace algunos años atrás.

"Esa lágrima que recorre mi facción izquierda"

Todo comienza a partir de esa primera lágrima que recorre mi facción izquierda

Aun cuando nada y todo son una misma cosa, yo me siento parte de aquel instante

Al parecer las circunstancias pueden llegar a retorcer tus convicciones y sencillamente se hacen partícipes en el suicidio moral acostumbrado

Una o dos veces al año, cuando mucho… ¿cómo se puede haber muerto tanto?

Y me burlo, sí, me burlo y hago comedia de mis momentos

Y me aguanto, sí, me aguanto las ganas de romperme para no hacerlo en serio

… ¿dónde realmente es que se almacena el sentimiento?

Al salir a la calle todo es sol, carros y gente

Y un poquito de ansiedad, quizás queriendo acelerar el tiempo

Y llega navidad, y también se irá… es lo único seguro

Y otros tiempos vendrán, otras sonrisas, otras comidas, otros deseos

Un centímetro de alegría que quisiera comenzar a ensayar.

24 años y algo más que comentar

Con espacios borrosos que influyen en cómo alguien podría verme

¿La edad está en la mente o en el cuerpo?

¿En lo que dices o en lo correcto?

¿En la vida y el recorrido, en todo lo anterior o es más que eso?

Y lo intento, sí, lo intento y en el intento me pierdo

Y me recupero, puede ser, me recupero pero a veces es tanto que siento que no puedo

Amas porque sí, porque es natural, esté el amor en tu corazón o en tu cerebro

Lloras porque sí, cuando es de verdad, sean días tristes o plenos

Y de pronto cae la noche, en silencio como el bostezo de un demonio

Y entre pensamientos, recuerdos, promesas y acuerdos

Una lágrima desciende desde mi ojo izquierdo

Trayendo consigo arsenales completos de miedo, con más armas y soldados

Ejércitos de sueños dormidos, flotando en ese espacio

… es imposible comprimir todo esto en palabras que duren exactamente los 3 minutos que tengo de atención

… y aun más hacerlo evitando que suene como algo peor.

Me imaginé un instante así, una vez en mi cuarto hace algunos años

Soñaba con sentir como se siente quemarse por dentro

Llevo varios días recordando, cambiando, reestructurando

Pedazos de mí, que dormidos insisten en despertar airosos

Y es que matemáticas para mí siempre fue algo pesado

La lógica no acompaña al misterio

Y no es que sea misterioso, es sólo que vivo volando

Ordenado y en desorden, ya me iré acostumbrando.

Y me disfrazo, sí, me disfrazo de psiquiatra frente al espejo, viendo todo esto

Y me consuela, sí, me consuela aparentar que nada veo

Y nada se interpone entre el dolor y yo, somos uno, somos esto

Cuando te falta tanto el optimismo duerme y sólo quedan recuerdos

Nunca antes unas letras han tenido tanto amargo

Nunca antes mi garganta había sentido este veneno

Y aunque leo y distingo, y calculo, siento y dosifico

Nunca antes había estado tan abierto, ¡tan vivo!

Firmo y sello este decreto, el instante del que he sido parte

Con fuerza y una lágrima que recorre mi facción izquierda.