Traductor, translator, traducteur...

agosto 22, 2014

RÉQUIEM... Concededme el descanso eterno, Señor.

Réquiem nace del impulso acelerado de producir en grandes cantidades lo que mejor sé hacer; una necesidad de imitar a grandes prodigios y sin melodías tener uno en mi haber, aunque escribo cantando, llorando y sin poder hacer ruido porque podría molestar a los que duermen al lado.

 
Réquiem es un descanso, una salida, exequias, el final de un ciclo sagrado y dañino; es el olvido total y es dejar atrás lo que nunca fue mío. Réquiem me motiva a volver a escribir sobre otras vidas, a inventar personajes, a hacer poesía, a hacer fantasías.

 
Réquiem termina con los insomnios y los somníferos; me ayuda a ser mejor que ayer y ser más cortés conmigo mismo. Réquiem además me dice que me salvé de unos meses de dolor y silencio sin fe, me grita que me ahorré días peores.

 
Réquiem me habla de Dios, y aunque hable de vos… aquí termina.
 
 
I. Amén.
II. Mansiones de cristal (Olimpo).
III. Corsé victoriano.
IV. Él no tiene sangre azul.
V. Numen (Voluntad abstracta).
VI. Un poco ortodoxo.
VII. Yo me quería enamorar.
VIII. Broquel.
IX. Corona de espinas, corona de rosas.
 
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario